En la Alquimia, el Proceso de Transformación se realiza analizando los 4 Elementos que componen al hombre , por separado.
De esta manera, se puede comprobar las falencias y vulnerabilidades que pudiéramos tener, para trabajarlas y transmutarlas en la Virtud que le corresponde.
Es decir, se limpia o quema lo negativo, y se permite renacer, en uno mismo, esa Virtud, que, en realidad, siempre estuvo en nosotros, a través del la Luz del Espíritu.
Comenzamos a desplegarla, al quitar los obstáculos que las energías de miedo, desvalorización e inseguridad, habían estado impidiendo que esa Luz saliera y se expresara.
Encontramos más abajo las características de cada Elemento que compone a cada uno de nosotros, para analizarnos y vernos reflejados en ellos, tanto en la Virtud, como en lo que pudiéramos tener que trabajar.
También lo podemos tener en cuenta, de acuerdo al Signo Zodiacal y Elemento que representamos.
Incluimos trabajos para ayudarnos a realizar ese Proceso de Transformación.
Esta Alquimia, es , quizás, como el Ave Fénix, que con el Fuego Purificador se quema, y luego Renace de sus propias cenizas, Manifestando todo lo Bello y Puro de la Verdad.
Causalmente, el Ave Fenix, es, especialmente, de plumaje rojo, y Simboliza al Fuego de la Purificación, al Renacer, y Surgir de lo negativo a la Vida y a la Virtud.
También representa a la Inmortalidad , quizás porque, tal como el Espíritu, que es Inmortal, hace surgir Su Luz, a pesar de los errores , o, más precisamente, porque quemamos esos errores, por medio del arrepentimiento y el perdón.
CARACTERÍSTICAS DE LOS CUATRO ELEMENTOS.
FUEGO
Es la Energía Vital.
Da determinación, fuerza y entusiasmo.
Es energía de vida, de sensualidad y sexualidad.
Da expansión, vigor.
Es transmutador y purificador.
Tiene el poder de modificar lo que toca.
En poca cantidad, flexibiliza.
En mucha cantidad, quema, anula, y realiza un estadío en el proceso de la alquimización.
En la cantidad justa y necesaria, produce la transformación que requiere el ser que lo utiliza.
Es el elemento que corresponde al chakra Plexo Solar.
También es el que corresponde al Manas Humano, el Fuego de la Mente humana.
Puede verse, pero no tocarse, porque transforma a su solo contacto.
DESEQUILIBRIOS EN EL SER HUMANO.
Se producen por el mal uso que los seres humanos podemos hacer con este Elemento, y que tenemos que aprender a equilibrar en nuestros cuerpos inferiores.
SÍNTOMAS:
CON MUCHO FUEGO, es decir, con exceso de fuerza , determinación, o preocupaciones, los seres humanos podemos sentir:
Ardor – sensación de fuego en el estómago-furia – ira – rabia.
En la autoexigencia, se puede sentir como fuego en el estómago, que serían las preocupaciones quemando las sustancias de nuestro aparato digestivo, literalmente hablando.
CON POCO FUEGO, o ausencia de fuerza y determinación:
Cansancio – agotamiento – falta de motivación, que podría traer enojos, rabias y temores. Tendencia a retener – falta de perdón y de soltar cosas.
SANACIÓN:
Podemos equilibrar este Elemento en nosotros, con ejercicios y la atención sobre el uso de nuestra energía vital, midiendo nuestras actividades, y evitando los excesos.
Sacar nuestra Voluntad, que sería el Fuego de Cuerpos Superiores.
Imaginar que el Fuego de los Rayos, queman, transmutan (condición del fuego), todo lo que no queremos sostener más.
Conectarse con este elemento.
Ver y reconocer, como puede cocinar nuestros proyectos con la fuerza, el vigor y la determinación que ponemos en cada uno de ellos.
Beatriz Seibane. Los 4 Elementos.
AGUA
Representa en nosotros al Cuerpo Emocional.
Relación con lo emocional, la nutrición, la suavidad, la dulzura y la ternura.
Es el amor incondicional hacia todos. La Entrega.
Es el elemento que se utiliza para lavar, limpiar.
El que flexibiliza a través de la humedad, que sería la ternura del amor.
También es el elemento que enfría lo que habíamos colocado en el fuego, y que puede parar la cocción.
También es el que, al contacto con el fuego, calienta todo lo que coloquemos en él.
El que hace de estabilizador, sin el agua, lo que esté en proceso de cocción, puede quemarse.
Si controlamos nuestras emociones, desde superiores, no permitiremos que nuestras preocupaciones avancen y quemen el contenido.
Es el elemento que fecunda, y que permite que todo pueda crecer.
También el que permite que, al ablandar, se unan las sustancias, como las grietas de la tierra, que, con el agua de la lluvia, desaparecen y todo se une.
Con el amor y nuestros cuerpos, igual. Con el amor y nuestros mundos, igual.
Pertenece al chakra Esplénico. Las sensaciones. Nutre o ahoga.
Puede verse, sentirse, pero no podemos sostenerlo. Puede escurrirse entre los dedos si no lo contenemos.
DESEQUILIBRIOS EN EL SER HUMANO.
Se producen cuando el individuo no maneja bien sus emociones, y las manifiesta a través de cualquiera de las 2 Polaridades, es decir, muestra sus emociones de manera exagerada ,y todo lo siente en exceso, o, cuando guarda esas emociones, reteniéndolas y fermentándolas.
CON MUCHA AGUA o emocional fuerte, se puede sentir que:
Inunda, absorbe.
Demasiada cantidad de amor (condicional), puede llevar a la sobreprotección y a anulación de los deseos, propios o ajenos.
CON POCO AGUA, o emocional débil, se puede sentir que :
Desnutrición, sed de..: Depresión, tristeza, sensación de soledad e insatisfacción.
También de traiciones y poco reconocimiento.
SANACIÓN :
Conectarse con este elemento.
Por su conexión con la limpieza, y la flexibilidad que produce el amor, el imaginarse dejarse llevar por el agua, y fluir con ella. Produce la sensación de entrega.
Sentir que el agua riega la tierra, la nutre, la fecunda, desarma y sana sus grietas
Representa las sensaciones de la soledad y la falta de amor hacia nosotros mismos.
Sentir que nos tenemos a nosotros mismos, que podemos contar con nosotros mismos.
Beatriz Seibane . Los 4 Elementos.
AIRE
Representa la vida.
Es el elemento del cardíaco, que también toma la zona de los pulmones.
Es el Amor, el optimismo, la apertura,
La aceptación y la confianza.
Los cambios y la flexibilidad.
El elemento que puede levantar o hacer caer cualquier cosa .
Como pertenece al cardíaco, y aquí encontramos la Llama Trina, que es de cuerpos superiores, desde aquí, podemos elevar las vibraciones de los cuerpos inferiores, cuyo peso es inferior .
Lleva o trae y atrae, debido al amor, y , precisamente, como el amor, puede entrar en cualquier lugar, y sin él, la sustancia no tiene vida.
Da vida o asfixia.
Puede sentirse, pero no puede verse.
DESEQUILIBRIOS EN EL SER HUMANO.
Se producen cuando el individuo no maneja bien sus pensamientos, y produce preocupaciones que inundan su mental, o se deja llevar por las consignas ajenas.
CON MUCHO AIRE, o pensamiento excesivo, se puede sentir que:
Todo se infla, y el exceso puede hacer estallar.
Sensación de opresión por exceso.
El ser se siente agobiado.
Cuando se da de más, produce malestar , y el malestar nos lleva a los enojos, que si no les permitimos salir, pueden hacer explotar el contenido, produciendo enfermedades físicas, emocionales o mentales.
CON POCO AIRE, o adhesión a pensamientos ajenos, se puede sentir que:
Sensación de opresión y atascamiento.
Sensación de ahogo por falta de espacio y libertad.
Ansiedad , desprotección. También traición.
Enojos, necesidad de protegerse.
SANACIÓN:
Conectarse con este elemento.
Con lo flexible, el volar, y la libertad de volar.
Con el viento, la libertad, pero en este caso, también la adaptabilidad.
El ir y el poder volver.
Cuando lo queremos. Cuando lo elegimos. Nosotros pensamos por nosotros mismos, y actuamos en consecuencia.
Beatriz Seibane . Los 4 Elementos.
TIERRA
Da seguridad.
También abundancia y disfrute.
Tiene conexión con lo bueno y simple de la vida.
Está representado por el chakra Básico.
Es lo práctico, lo que nos conecta con la realidad.
Y todo lo firme.
Porque sostiene, pero, también puede frenar.
Es símbolo de solidez y estabilidad.
Siempre y cuando se lo utilice para basarse en ella y no para quedarse sólo sobre ella.
Representa a la base suficientemente sólida , como para permitir construir sobre ella, y elevarse, siempre superándose.
DESEQUILIBRIOS EN EL SER HUMANO.
Representa la conexión que tenemos con todo lo material, nuestro cuerpo físico, y todas nuestras propiedades. Nuestra cimentación y la sensación de pertenecer o no a un lugar o rol determinado de nuestras vidas. Nuestras estructuras mentales.
CON MUCHA TIERRA, o estructuras rígidas:
Puede retener y frenar.
Buscar sólo lo que se puede ver, sin permitir que la imaginación y la creatividad nos lleve a volar hacia nuevos horizontes.
Tozudez.
CON POCA TIERRA o estructuras mentales débiles:
Inseguridad, miedo.
Mareos, letargo, vértigo.
Debilidad, enojos, rapiña.
Sensación de no pertenencia .
SANACIÓN.
Conectarse con el elemento.
Sentirse parte de él, de las flores, del campo, de la tierra, los minerales.
El “bajarse del caballo”, es decir, soltar la soberbia de estar siempre en el mental, y su lógica pura, y conectarse con lo simple y puro de la naturaleza.
Su fluir, su sabiduría, su adaptabilidad.
Su nutrición, su amor.
Su fuerza y vigor.
Y entonces, vemos que aquí reunimos a todos los elementos, y que, este elemento contiene a todos.
Es la representación de la materia.
El que nos permite vernos a nosotros mismos y a los otros.
Es tangible. Puede tocarse, verse, y sentirse. La totalidad de la Materia.
Beatriz Seibane.
